Desde hace muchos años he tenido la inmensa fortuna de poder compartir ideas con Dilman, recibir de él su sapiencia y su manera impresionante de ver y sentir la vida, sus inquietudes artísticas, su minuciosa y disciplinada búsqueda de las respuestas a los tantos y tantos interrogantes que a través de la historia han sido la constante de la raza humana.
Comencé a crecer hacia otra dimensión del pensamiento al lado de este hombre, que no es uno cualquiera, es un hombre que, para mi, está a la altura de esos imprescindibles de los que hablara Bertolt Brecht.
Por haber marchado juntos por la vida, lanza en ristre, uno como el Quijote y el otro como Sancho, y, no me pregunten cuál de los dos era quién, porque no lo sé, puedo decir, que Dilman es un soñador con los pies bien puestos sobre la tierra, un apasionado de las letras, un enamorado del arte y un sabio sin ser un petulante.
Permitanme ahora dirigirme directamente a él.
Dilman, mi querido hermano, compañero, camarada, te debo mucho: fuiste mi consejo oportuno, el faro que me sigue guiando en el arte de saber trascender, el amigo solidario, el filósofo, un maestro, pero, ante todo, tú eres el poeta!
A manera de ejemplo, cito el último verso de tu poema Pronto sabré quién soy, que acabas de publicar en tu bitácora "Número 13" y que es una muestra evidente de lo que antes afirmo. Extraordinario poema!!!!
“Yo recojo algunos sueños/
que tiemblan en su propia espiral/
abandonados en las cúpulas de milenarios templos,/
(herederos de un cielo que se quiebra,/
que se cae a pedazos)/
y con ellos escucho complacido/
el canto nocturno/
de las semillas que persisten en brotar/
desde el vientre de la tierra… “
Dilman
Desde hace muchos años sentí la necesidad de hacerte un pequeño homenaje como una muestra de admiración y respeto, y, pienso, que la mejor manera de hacerlo, es a través de este blog. No me cabe la menor duda que todos aquéllos que te visitan, estarán de acuerdo conmigo en lo que aquí escribo. Tú sabes, que hace mucho tiempo, te llevo en un rincón del alma, allí donde guardo mis mejores y más preciados tesoros. Cuando leo los comentarios que dejan tus lectores en Verde que te quiero verde http://dilman-verdequetequieroverde.blogspot.com/ y en Número Trece http://numero-13.blogspot.com/, siento una felicidad inmensa, porque puedo sentir el respeto y admiración de quienes te visitan y te reconocen como a un increíble ser humano y, a la vez, como a un maestro.
A continuación Dilman, te ofrezco y, desde luego, a mis lectores, un poema que va en esa linea de los constantes interrogantes que nos surgen y nos seguirán acompañando por siempre.
Fotografía de Tommy Lundberg
©
Supongamos
Supongamos
que antes de ser
materia terrenal
éramos
un rayo cósmico
desafiando el universo.
Supongamos
que viajamos siempre,
por siempre,
años luz de interrogantes
y nos encontramos
con la tierra.
Supongamos
que éramos energía,
que fuimos y somos
un viaje fugaz
por el infinito.
Supongamos
que nuestro viaje
nos hizo diferentes,
que no teníamos forma
y para ser
abrazamos la materia.
Supongamos
que fuimos un hálito
de vida,
esa energía
fugaz del universo.
Supongamos
que después
fuimos razas diferentes,
lenguas bien distintas,
hicimos el amor,
creamos dioses,
y nos inventamos
el infierno.
Supongamos
que después
de la muerte
abandonamos,
hastiados y aterrados,
este mundo
de miserias.
Supongamos
que emprendemos
nuestro viaje de regreso
a un lugar,
a años luz de nuestra tierra,
a ese lugar donde nacimos,
energía universal,
alma en la materia.
Supongamos
que sólo somos
un supuesto de la historia.
Gustavo Figueroa Velásquez
©
Supongamos entonces y quizás no sólo sea una hipótesis sino nuestra realidad.
ResponderEliminarEstos pensamientos hechos poesía me recuerdan a mi padre.
Saludos que tengas una linda semana.
Es hermoso y realmente bello este poema y el homenaje que le haces...
ResponderEliminarBesos.
Morgana
Julia:
ResponderEliminarParece que entre tu padre y yo algo nos unió y todas las fuerzas del universo, como dice Pablo Coelho, han conspirado para que tú llegaras a mi blog y le recordaras. Si se da eso a través del arte y para un buen recuerdo, entonces, yo me siento un privilegiado en este mundo.
En nombre de tu padre, te envío un beso y un abarazo.
Gracias por tu comentario.
Morgana:
ResponderEliminarGracias por estar aquí y gracias por tus palabras. Un amigo es un tesoro al que hay que cuidar con mucho esmero.
Un abrazo.
Te honra todo lo que dices de tu amigo. Su poema es muy bueno.
ResponderEliminarY tu suponer también lo es. Si suponemos eso, hagámoslo realidad en nuestro día a día.
Besos Gustavo.
Feliz día del Poeta para tu amigo, y para ti.
Duna:
ResponderEliminarMil y mil gracias por tu comentario e igualmente para ti.
La gente que nos rodea también dice mucho de nosotros mismos, así que si tu amigo es tan especial (se ve por su escrito), tú también debes serlo.
ResponderEliminarMe sorprende la tremenda coincidencia de lo que hemos publicado a la vez, pues el tema de tu poema (maravilloso)en esencia es el mismo que el de mi último post. Qué estupenda conexión! Y qué bello que lo puedas expresar de esta manera tan acertada!
Un cordial saludo. Te sigo
Amiscamaradas:
ResponderEliminarLa vida está llena de coincidencias y qué bueno que tú y yo las tengamos. Gracias por tu opinión sobre mi poema. Seguiremos en plena conexión.
Yo también te sigo.
Gracias Gustavo por esta edición que la tomo como un homenaje a la amistad y a los propósitos de construcción del mundo acorde al respeto a la vida que todos y cada uno nos merecemos. Tu composición es una reflexión profunda que toca el fondo de la existencia misma paso obligado de la poesía para que reverdezcan los versos.
ResponderEliminarMi abrazo Poeta!!!
Dilman:
ResponderEliminarOtro abrazo para ti, hombre integro!
Precioso homenaje a la amistad, que, junto con los bellos versos, ha quedado perfecto.
ResponderEliminarSaludos.
Amigo: Es ahora, en vida, donde debemos reconocer la amistad que nació en la gallada, que nos ha dejado tantos recuerdos inolvidables, enseñanzas, compañía oportuna en los momentos, en que más se necesita de un amigo. Que gran homenaje.
ResponderEliminarAmigo: Hermoso poema, sigue suponiendo que te sale muy bien.
100 años de soledad, ¿te gusta ese libro verdad? Lo he estado buscando en las librerias y no lo he emcontrado, he leido la reseña y dicen que esta bien bueno el libro, yo ahorita estoy leyendo uno que se llama dibujante de sombras :) esta interesante, llevo dos diias leyendolo y ya llevo 3 capitulos, me faltan 2 :) mañana me lo termino jhejhe...
ResponderEliminarGustavo: comparto tu sentir y admiración para con Dilman. Hombre íntegro como le llamas. Poseedor de sabios versos, de verdades profundas y mensajes al Alma. Las entradas que presenta en sus dos blogs, son presentaciones completas, entre lo académico, literal y existencialista. Una honra al saber y pensar de la humanidad. Que bueno le hayas hecho este homenaje. Yo hago extensivo el reconocimiento con este comentario.
ResponderEliminarAhora bien amigo Gustavo. Escribo aparte, por que mereces tanto halago como bien lo has hecho para Dilman.
ResponderEliminarLa inspiración que brota de tu alma, el sentir y madurez que vibra en tu espíritu, la energía cósmica que cargas y que irradias, a través de tus palabras, versos y poesías, es también para resaltar.
De donde viene ese supongamos? es que quizás aun sientes cuando tu estrella y cola cósmica penetraron en la materia terrestre?
Es que acaso tu calor astral es más fuerte que la sangre que circula en tu cuerpo?
Será que las particulas y luces que implican la transmutación de la materia de cuerpo se hacen más pesadas cada día?
Puedo suponer que transmutaremos juntos en LUZ en futuro próximo?
De momento eres Luz en nuestras vidas. Gracias.
Gustavo, que bello homenaje a la amistad que los une. Sin duda que es grande. El poema precioso. Te dejo un beso, cuidate.
ResponderEliminarMaria:
ResponderEliminarGracias por tu amable comentario y bienvenida a mi blog.
Saludos.
Sonia:
ResponderEliminarEstoy de acuerdo contigo en que es en vida cuando se deben rendir los homenajes y, sobre todo, a cada amigo y amiga que quedó en nuestros corazones, desde aquél tiempo de noches en el parque de El Cerrito.
Este homenaje también es para ti, entrañable amiga.
Un abrazo y un beso.
Leticia:
ResponderEliminarCien años de Soledad es, junto al Quijote, una de las obras literarias más grandes de la historia de la lengua española o castellana. Vas por buen camino cuando dedicas el tiempo a la lectura; un buen libro te va edificando intelectualmente y, porqué no, espiritualmente.
Sigue así.
Un abrazo para ti.
Gracias, Gustavo, por devolverme la visita, para no perder tu blog, voy a dejarlo enlazado, con tu permiso, en mi lista de blogs.
ResponderEliminarSaludos cordiales.
Luis:
ResponderEliminarGracias por sumarte a ese homenaje que le he hecho a mi amigo Dilman. Tu sensibilidad humana es muy grande y, pienso, que personas como tú deberían multiplicarse por miles en este planeta tierra.
De dónde viene el supongamos? Viene de mis propios interrogantes cotidianos que, a la vez, son los de la humanidad. Y, esto de cuestionarse todo, es muy importante porque nos hace más sabios y, también, más ignorantes. Quiero decir, que cuanto más aprendemos más nos damos cuenta que no sabemos nada.
Un abrazo Luis.
Poetiza:
ResponderEliminarGracias por tu comentario y el buen comentario sobre mi poema.
Gracias, además, por tu calor propio de esa noble raza mexicana.
Un beso.
Maria:
ResponderEliminarMil gracias.
Gustavo: comparto plenamente contigo tus apreciaciones acerca de Dilman. Siempre que entro en sus blogs, lo hago con muchísimo respeto, pues sé que cada publicación está absolutamente estudiada, meditada... e impregnada de auténtica sabiduría. Lo admiro muchísimo, y, si me lo permites, me uno a tu homenaje.
ResponderEliminarPor otra parte, me parecen magníficos los versos que le dedicas.
Un beso.
S.
Soledad:
ResponderEliminarClaro que te lo permito y gracias por tu apreciación sobre mis versos.
Un abrazo.
Yo lo empiezo a conocer a través de sus letras, y también me sumo al homenaje…, aprenderé de él, igual que tú lo has hecho. Un saludo.
ResponderEliminarSuponiendo que no somos nada, que no tenemos claro a qué venimos a este mundo terrenal, me surge la duda de si es justo que unos lleguen con ventajas sólo por cuestiones geográficas, si es justo que además de eso, se empobrezca a los más pobres para aumentar nuestro nivel de vida...
ResponderEliminarMe surge la duda de no saber a ciencia cierta si aquellos que hacen mis zapatos, mi ropa, mis electrodomésticos y todo aquello que me rodea día a día, si esos parias tienen, al menos, la milésima parte de lo que han fabricado para el resto de la humanidad...
Suponiendo que sólo estemos de paso, y en tan breve espacio de tiempo, mira todo lo que hemos logrado!
Besito
Pedro: siempre habré mucho que aprender al lado de Dilman.
ResponderEliminarUn abrazo,
Mariola: entiendo tu reflexión y me uno a ella.
ResponderEliminarBienvenida a esta bitácora.
Un abrazo.
Gustavo, paso a saludar y dejar un beso y vuelvo a leer tan hermoso homenaje a Dilman. Cuidate.
ResponderEliminarGustavo, muchas gracias por acompañarme en mi poema. Ya pasó el frío, amigo.
ResponderEliminarHay momentos de añoranza que son imposibles de no sentir, y para alguien que escribe, imposible de no plasmar.
Lo importante es no quedarse anclados en esos momentos, y yo , por suerte, ya lo remonté.
Mil gracias.
Mil besos.
Buen fin de semana
GUSTAVO,he de comunicarte que por motivos de salud,dejo el blog por tiempo indefinido.
ResponderEliminarMil besos.
Duna: Eso es cierto...hay que salir de aquéllos instantes que no son agradables.
ResponderEliminarSaludos.
Morgana:
ResponderEliminarEspero que pronto estés bien de salud y puedas retomar tu lindo trabajo cultural.
Mientras tanto te extrañaremos.
Un abrazo y cuidate.
Hola. Vim convidar pra ver o vídeo que fiz, no Blog: Sentimentos.
ResponderEliminarhttp://sentimentos-jacque.blogspot.com
Beso
jacque:
ResponderEliminarEu vi seu vídeo e eu acho muito bonito e a mensagem deles/delas é ter em tudo porque fala de amor. O amor é o sentimento mais bonito que deveria mudar à humanidade.
Desculpa meu português que não é bom mas eu gosto muito.
Bem-vindo sempre para meu blog.
Esa es amistad de la buena y me encantaron tus versos. Bravo!!!!
ResponderEliminarUn gran abrazo para ti.
Salvador: Si amigo, así es y gracias por tu comentario.
ResponderEliminarOtro abrazo para ti.
Gracias. Seu português é ótimo!!!!!!!!
ResponderEliminarEu que não sei escrever quase nada em espanhol.
Obrigada por seguir meus Blogs... estou feliz.
Beso con ternura
Jacque
Comparto tu admiración por Dilman y quedo conmovida por el poema que has escrito en su homenaje. Es bellísimo y emocionante, me ha llegado muy hondo ese viaje de ida y vuelta del ser humano desde la luz a la luz. Sólo hay un verso con el que no me siento de acuerdo, el que dice que "inventamos el infierno". No creo que lo inventemos, querido amigo, sino que lo creamos, porque aunque vengamos de la luz, arrastramos en nuestros corazones muchas sombras, algunas terriblemente negras. Un fuerte abrazo con mi admiración.
ResponderEliminarIsabel:
ResponderEliminarGracias por compartir por compartir mi admiración por Dilman y gracias por tus palabras respecto a mi poema. Ah, en todo caso, estamos de acuerdo en eso del infierno.
Un abrazo también con mucha admiración para ti.
Holaaaa!
ResponderEliminarAqui llegué yo como nueva en estos quehaceres de las bitácoras. Siempre he admirado la sensibilidad, dedicación y capacidad creativa de Gustavo para escribir sus poemas. Admiro su lealtad a la amistad. Nos seguiremos encontrando. Un abrazo
AnaLu
Hola AnaLu...
ResponderEliminarBienvenida a esta bitácora. Gracias por tus palabras las cuales me producen una gran alegría, a la vez, que me estimulan a continuar desarrollando este interesante trabajo cultural.
Un abrazo y un beso.